Novela motora: Robinsón Crusoe

Terminando el último libro de Don Carlos Ruiz Zafón, el autor hacía una hermosa reflexión sobre el papel del lector y decía (casi textualmente, que escribo de memorieta) "Muchas gracias al lector por tomarse el tiempo de darle alma a mis personajes". 

Es curioso, que en el ámbito escolar, el trabajo de la lectura se reduzca a dos pilares: velocidad lectora y comprensión lectora. Dónde queda entonces las sensaciones, los sentimientos, el ambiente...a fin de cuentas, dónde queda la oportunidad, competencia de exclusiva del lector, de dar sentido a lo que se lee. Es obligación de todo maestro enseñar a disfrutar de la lectura, es necesario crear las situaciones y generar el interés necesario para que nuestros alumnos adquieran el don, casi divino, de dar alma a las palabras. Quién no ha sentido hambre leyendo la descripción de un delicioso manjar o ha empatizado con los sentimientos ricamente detallados de un personaje.  Centrarnos en los aspectos cuantitativos de la lectura no va a generar la necesidad de leer de nuestro alumnado, ni tampoco la convertirá en una alternativa de ocio, servirá para hacer  gráficos y generar estadísticas muy bonitas ...pero poco más. 

Así nace la novela motora, una forma de dar vida y de crear ambiente en torno a una obra como la de Robinsón Crusoe. Creemos que esta forma de fomentar la lectura, especialmente de los libros que son "poco accesibles" para nuestro alumnado por su complejidad y densidad, es una manera muy positiva de llevar la teoría de los párrafos anteriores a la práctica.  

Aquí un trailer de aperitivo. 

 En esta ocasión hemos intentado poner nuestro empeño, precisamente, en todos los detalles que ayudan a que el alumno potencie su imaginación; los sonidos, la sensación de peligro y el sentimiento de aventura. Además hemos tratado de trabajar de forma interdisciplinar diferentes contenidos a través de la cooperación, tremendamente necesaria en nuestro entorno para facilitar y mejorar las relaciones entre todos los participantes, tanto alumnos como maestros.  

Aquí el vídeo con el juego completo. 

Ha sido una experiencia espectacular. Nuestro alumnado ha sabido reconocer nuestro esfuerzo dedicándonos todo su  interés y entusiasmo.

En cuanto a mis compañeros, hay que decir que un trabajo como este, donde se exige mucha organización, la adecuación de espacios y la reestructuración de horarios, el claustro ha estado extraordinario y superándose cada vez más en entrega e ilusión. Destacar especialmente la labor sublime de mi noble Viernes, no solo ha vivido la historia y ha sabido transmitirla, además es una pieza clave en cualquier sarao de esta índole. A "Tiburón Bruce", por su sabiduría terrenal, su hilo bramante y su "pechá" de trabajar por el equipo.  A la vaquita "Sopaipas" que se nos fue esta semana pero que nos hizo disfrutar con su profesionalidad desde septiembre, por dejar parte de su corazón en Los Arrayanes y por enseñar a nuestros alumnos que cuidar a los animales es la mejor manera de cuidarnos a nosotros mismos. Seño Mari Carmen, gracias por las barbas XD.

Como Robinsón particular, quiero agradecer y dedicar esta entrada a mi entrañable "Seño Borrona". Gracias por cuidar de los míos mientras yo estaba inmerso en los mundos del Sr. Defoe, por tener paciencia y bondad infinita. Gracias a tu labor, los demás podemos desmarcarnos un poco para anotar un tanto.  

"Y esta mis queridos españoles, es la primera lección que debéis aprender: Solo trabajando juntos y unidos podréis sobrevivir a los peligros de la isla"